top of page

El placer de leer



Leer o no leer. Seguro que Shakespeare me hubiera dado licencia para metamorfosear una de sus frases más conocidas. Leer, siempre, puesto que su contrapartida, no leer, no nos aporta nada más que ignorancia y nulo juicio crítico. Pero además, y no es poco, leer nos produce placer, placer por conocer lo desconocido, de adentrarnos en lejanos países, de intentar comprender las respuestas ante complejas situaciones de personajes de novela, o de no ficción. Leer no solo nos enseña a descubrir lo ignorado, sino que nos prepara para alcanzar nuevas cotas de conocimiento, de estímulos intelectuales. Decía Jorge Luis Borges que "otros se enorgullezcan por lo que han escrito, yo me enorgullezco por lo que he leído". Un libro es la mayor fuente de placer que nunca haya inventado el humano.

5 visualizaciones0 comentarios
bottom of page